Imagina un 8 de diciembre de 1980; John y Yoko salen de Dakota House hacia los estudios de grabación. Al salir a la calle, como en muchas otras ocasiones, la pareja se encuentra con algunos aficionados que rodeando el automóvil intentan conseguir un autógrafo del ex Beatle; entre ellos Mark David Chapman....el mismo que, horas más tarde, pasadas las once de la noche, cuando John y Yoko volvían del estudio para cenar tranquilamente con Sean, aborda a la pareja.
John voltea al escuchar su nombre: "¡John, John!" ....y simultáneamente un estruendo sacude la calle y un capítulo de toda una generación queda escrito con sangre.
Chapman efectuó cinco disparos, cuatro de los cuales fueron contra el pecho de Lennon.
Las últimas palabras pronunciadas por Lennon fueron "I've been shot, I've been shot!!". Cuando era trasladado al Hospital Roosvelt, un agente le preguntó si era John Lennon; éste respondió con un escueto: "Yeah"....fue su despedida del mundo.
Cuantas melodías y frases inspiradoras nos fueron robadas aquella fría noche de diciembre; canciones que nunca escucharemos; sentimientos que nunca experimentaremos.
Aquel desequilibrado mental nos robó, sin saberlo, al mas grande artista del siglo XX.
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